El Dr. Carlos Guillén, dermatólogo con amplia experiencia nacional e internacional y actual Jefe de Servicio de Dermatología del Instituto Valenciano de Oncología, nos habla del tipo de cuidados que se deben tener para la protección de la piel de las manos.

¿Cuáles son los principales efectos del envejecimiento en la piel de las manos?

En la piel se distinguen dos tipos de envejecimiento, con sus diferentes características cada uno. El primero es el denominado INTRINSECO y se deriva de la edad cronológica de la persona, en todos los tipos de piel. Los efectos de este envejecimiento son la sequedad de piel, con descamación, color homogéneo de la superficie cutánea, atrofia o disminución del grosor de la piel lo que conlleva una mayor fragilidad y por último la formación de arrugas finas como consecuencia de la menor funcionalidad de las fibras elásticas.

Por otro lado tenemos el envejecimiento EXTRINSECO, también denominado FOTOENVEJECIMIENTO, que se ocasiona por los efectos acumulativos de los rayos ultravioleta sobre la piel. Este tipo de envejecimiento puede aparecer en personas que han tomado el sol sin protección desde muy jóvenes y no depende de la edad. Se aprecia como una piel de textura rugosa, con sequedad de piel, con alteraciones de la pigmentación que se pueden mostrar tanto en los denominados lentigos o manchas marrones del sol como zonas blanquecinas denominadas hipo melanosis idiopática. Ambos efectos son consecuencia de las alteraciones genéticas de los meloncitos por la radiación ultravioleta.

El dorso de las manos de personas de tez blanca constituye una zona especialmente afectada por este tipo de Fotoenvejecimiento al estar habitualmente expuestas a los rayos solares.

¿Qué consecuencias puede tener el no cuidar la piel de las manos adecuadamente (riesgos de sequedad extrema)?

Para cuidar la piel del envejecimiento intrínseco deben emplear cremas emolientes e hidratantes que eviten los efectos de la perdida de la secreción sebácea. El denominado manto ácido de le piel esta alterado. Por esto si no se aplican estas cremas o lociones la piel se puede llegar a descamar con aparición de picor, pequeñas fisuras e irritaciones al contacto con sustancias irritantes como detergentes, etc.

Por otro lado en las personas de piel clara, donde el fotoenvejecimiento producido por el sol se hace evidente, los cuidados que se deben tener son la protección de la piel frente a los rayos ultravioleta, mediante la aplicación de pantallas o filtro solares. Si esta protección no se cuida a los largo de los años, puede llegar a tener no solo efectos cosméticos como la aparición de manchas sino llegar a presentar patología cutánea como la aparición de queratosis solares o en último caso cáncer de piel.

¿Es aconsejable exfoliar la piel de manos y pies? ¿Cómo se debe hacer este gesto?

No es aconsejable la exfoliación si se entiende este proceso como la eliminación de la capa cornea mediante agentes físicos: abrasión, frotar la piel con manoplas rugosas etc, Este proceso en una piel muy fina como la descrita, puede producir un mayor daño. Por el contrario si se entiende por exfoliar la aplicación de cremas de urea, o ácido láctico, este proceso si que es beneficioso y mejora las alteraciones superficiales como rugosidad, sequedad etc.

¿Qué estrategias se pueden utilizar para potenciar la efectividad de los productos específicos para hidratar y nutrir la piel de las manos?

Los cuidados de la piel envejecida deben ser motivo de un cuidado muy constante y permanente a los largo del tiempo. En medicina el axioma “la mejor medicina es prevenir” es especialmente valido en este campo ya que el fotoenvejecimiento se puede evitar en parte con los cuidados de la piel aplicados desde que se es joven. Hay que tener en cuenta que cuando la piel ya está envejecida, con sequedad, manchas etc., los tratamientos solo son paliativos y unca revierte el daño producido por el sol.

¿Cuáles son los factores que más influyen en que la piel de los pies presente sequedad, durezas, grietas, etc.?

En la piel de los pies influyen los factores descritos anteriormente, pero hay que añadir el efecto de la oclusión por el calzado y las zonas de rozamiento. Estos factores provocan una respuesta de la piel con producción de una mayor capa cornea que se manifiesta en las durezas o callosidades. También existe un tipo de engrosamiento de le piel de los pies, que se denomina QUERATODERMIA CLIMATERICA, que aparece en mujeres menopaúsicas, y puede ser una condición muy molesta si no se trata adecuadamente con cremas que disminuyan la capa engrosada de la piel y en algunos casos antibióticas cuando aparecen grietas. Son debidas a la disminución de los estrógenos en sangre.